El mundo que mirábamos e imaginábamos hace un tiempo como el “Futuro”, ahora es nuestro presente. Máquinas interactuando y colaborando con los humanos. Ya los bancos utilizan tecnología de automatización para sus procesos más relevantes, los supermercados tienen menos personal en cajeros y se enfocan en el auto pago por máquina o incluso por detección de rostro y las grandes industrias utilizan bots para dar a los clientes soporte.
Estos son algunos de los ejemplos que hace entender que estamos entrando a una nueva era industrial 5.0., donde el IoT (Internet of things), RPA (Robotic Process Automation), IA (Inteligencia Artificial) y la computación cognitiva son parte de nuestra vida cotidiana. Estas herramientas van avanzando y mejorando a un ritmo de tiempo tan rápido, que el mundo industrializado no ha terminado de adaptarse a la tecnología actual e inicia un nuevo ciclo de otra herramienta que revoluciona el mercado.
Pero ¿Cómo se llegó a lo que vivimos actualmente? ¿Quién lo desarrolla? La respuesta surge de una necesidad que tiene el ser humano de mejorar los procesos en todos los campos de su vida. En el pasar de los días buscamos completar las tareas de forma eficiente, eficaz y en el menor tiempo posible.
Analizando el mercado actual vemos cómo evolucionan las diferentes industrias. En el campo del comercio, ya plataformas como Ecwid, WordPress, Wix, entre otros, ofrecen un servicio completo para tener negocio en línea. Tesla sigue creando y mejorando sus automóviles con tecnologías que son tendencias, con el fin de llegar a un modelo preciso de autopiloto. Hace un tiempo nuestros domicilios los hacíamos mediante una llamada por teléfono, ahora simplemente desde tu app puedes ordenar tus pedidos.
Esto es lo que estamos viviendo, ¿Qué se espera en el futuro?, ¿Estaremos preparados? Vemos como el tiempo y el mundo va a una velocidad constante, donde se llegará a un momento, donde los robots sean quienes realicen las cirugías. Además, tendremos tecnología implantada en nuestro cuerpo para ser monitoreados, las impresoras 3D tendrán un papel fundamental en el sector inmobiliario y se llegará a un cambio total en el campo energético, siendo el sol la fuente principal de la generación de energía.
Llegamos a este tipo de tecnologías debido al constante desarrollo, la lógica y la investigación de ingenieros y científicos, a partir de algoritmos y diferentes ramas de las matemáticas, cómo el cálculo o la física. Estamos en capacidad de crear un dispositivo o una máquina, donde a partir de una cantidad gigante de datos, la máquina llegue a la más alta precisión, para cumplir cualquier labor que se le asigne. En el área de machine learning y automatizaciones se hacen constantes simulaciones y pruebas, para lograr que los dispositivos tomen decisiones autónomas a partir de diferentes situaciones.
Entre más datos tengamos, mejor se puede entrenar a la máquina, para que tome decisiones autónomas. En este escenario, con las herramientas para crear esta tecnología que le facilita el trabajo a las personas, todavía hay muchos campos que faltan por explorar y mejorar, para llegar a una precisión casi que perfecta.
Aceptemos la realidad: tenemos que asimilar que ya estamos viviendo en la nueva era de la inteligencia artificial, en todos los campos, especialmente en la industria y en la ciencia.
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